Magdalenas Saladas: con queso fundido, bechamel y huevos de codorniz

Esta receta de Magdalenas saladas nos encanta, tiene unos ingredientes increíbles y no pueden estar más deliciosas. Nosotras preparamos una magdalena por cada comensal, ya que sacian muchísimo, aunque también es una buena recomendación elaborar un par de magdalenas de sobra, porque con el sabor tan riquísimo que tienen seguro que puede haber alguien que quiera repetir. Aquí los ingredientes que hemos dispuesto son para la preparación de cuatro magdalenas saladas, así que si queréis hacer más tenéis que ir calculando las cantidades. También es importante que se sirvan prácticamente recién hechas porque hay que comerlas cuando estén calientes. Esperamos que os gusten 🙂
Ingredientes
- 4 rebanadas de pan de molde sin corteza
- 4 lonchas de jamón de York
- Queso rallado emmental
- 4 huevos de codorniz
- Mantequilla
- Para la bechamel
- 50 g de mantequilla
- 50 g de harina
- 2 cucharaditas de mostaza Dijon
- 1/2 l de leche entera
- Sal, pimienta y nuez moscada al gusto
Preparación de la bechamel
En una sartén derretimos la mantequilla, tostamos la harina, y mientras vamos añadiendo la leche, batimos con unas varillas para que no se formen grumos. Después, añadimos la sal, la pimienta y la nuez moscada al gusto; por último, la mostaza. Reservamos.
Preparación de las Magdalenas saladas
Preparamos para ello unos moldes que normalmente usemos para hacer flanes, por ejemplo. Aplastamos las rebanadas de pan con un rodillo y las untamos con mantequilla, entonces las metemos en los moldes como si fueran una tulipa; a continuación, ponemos el jamón de York, después los huevos, y rellenamos los moldes con la bechamel. Los espolvoreamos con el queso, y con una brocha pintaremos con la mantequilla los picos que queden fuera. Introducimos las magdalenas saladas en el horno (previamente precalentado) y las gratinaremos hasta que estén doraditas. Hay que servirlas bien calientes.
Si te ha gustado esta receta tan rica, te recomendamos nuestros Calabacines rellenos.
Menuda pinta que tienen estas magdalenas saladas. Para pegarle un bocado a la pantalla, vamos…
Y no se ven muy difíciles de hacer. La bechamel es quizás el punto crítico de esta receta. No son siempre fáciles de coger el punto y necesitan un poco de práctica para que no queden grumosas. Pero definitivamente tengo que hacerlas.
Ya os mandaré la foto cuando lo consiga…..
¡Abrazos!
Están muy ricas y jugosas, cuando le das el bocado la bechamel se derrama y es delicioso. Con una magdalena te quedas súper lleno. Los fideos todavía los estamos esperando…, jejejjjj…